Quizás hayas oído hablar en las noticias del clima extremo que azotó la Isla del Príncipe Eduardo durante el huracán Fiona en septiembre. Pensé que te gustaría saber cómo resistió tu invernadero Sigma de 6 metros con vientos de 150 km/h y un árbol que cayó sobre él.
Punchline - ¡¡¡Lo hizo genial!!!
Historia... Terminamos de colocar las correas metálicas en el invernadero y de fijarlo a la estructura el viernes bajo la lluvia, la misma mañana de la tormenta. Seguimos tu consejo de ubicar el invernadero lejos de los árboles, pero era muy difícil hacerlo debido a nuestra propiedad y al tamaño de los árboles que nos rodean. No tuvimos oportunidad de colocar los postes de soporte en el interior.
Vivimos en 2 hectáreas en un pequeño valle. Normalmente, cuando llegan tormentas fuertes, parecen pasar por encima del valle en lugar de golpearnos con fuerza. Sabíamos que iba a ser una tormenta fuerte, pero el invernadero está en una zona muy resguardada de nuestro jardín, así que nos fuimos a dormir con la esperanza de que todo saliera bien.
Fue una noche salvaje que no quiero revivir jamás. Cuatro árboles cayeron sobre nuestra casa, perdimos tejas, tenemos un contenedor de 12 metros en nuestra propiedad que se salió de su base, y nuestra caravana fue empujada contra nuestra camioneta, aplastando la caja. También perdimos más de 100 árboles en nuestra propiedad, incluyendo uno cuya punta cayó sobre nuestro invernadero nuevo. ¡Sí, a llorar!
Con el árbol sobre el invernadero, se rompió el fleje metálico y, como resultado, uno de los paneles laterales se soltó, sujeto solo por dos tornillos. Ese panel lateral ondeó con vientos de 150 km/h durante unas 12 horas y al día siguiente con vientos de 80 km/h.
Cuando el viento amainó y salió el sol el domingo, evaluamos los daños y nos pusimos manos a la obra. ¡Y vaya si lo conseguimos! Sacamos el árbol del invernadero, el panel superior volvió a su sitio, tuvimos que doblar la pieza de soporte (¡queda genial!) y el panel lateral, que se agitó con el viento durante dos días, está prácticamente como nuevo, salvo por un par de arrugas.
Tenemos el invernadero sujeto a una estructura con postes hundidos. Nos alegramos mucho de haberlo hecho, porque de lo contrario no creo que hubiera sobrevivido la noche.
Me preocupaba mucho lo resistentes que eran esos paneles de policarbonato y los manipulé con mucho cuidado. ¡Digamos que ya no me preocupa tanto!
Me acabo de dar cuenta de que no tengo una foto de todo montado de nuevo, ¡pero se ve genial!
Gracias por un invernadero tan bueno. Si hubiéramos tenido las vigas de soporte en el interior para soportar el peso del árbol, no sé si habríamos tenido ningún problema con el panel lateral.
Karen
Agotado
